jueves, 18 de agosto de 2016

Algoritmos.

                 "Los problemas me recuerdan a un cubo de Rubik,
                   al principio parecen complejos e incluso imposibles,
                   pero siempre hay algoritmos para resolverlos"





Buenaaas a todos los que os aburrais tanto como para leer mi blog. Hace ya tiempo que no me dirijo a vosotros, espero que la vida os esté tratando bien.

He decidido comparar los problemas que aparecen en nuestra vida (Por desgracia en la mía casi constantemente) con los cubos de Rubik. Podréis pensar, jode, que frikaza ( Y os doy la razón, un poco friki soy), pero esta friki ha hecho una metáfora en la que intenta explicar como enfrentarse a las dificultades que se nos presentan.

Cuando aparece un cubo en nuestra vida, ya sea de tres por tres o diez por diez siempre tiene solución. Al principio puede que nuestra reacción sea dejar el cubo sobre la mesa y mirarlo durante horas sin siquiera intentar un movimiento, pero sabemos que ese cubo va a seguir sobre la mesa de nuestra vida y debemos afrontarlo en algún momento, porque sino nuestra mesa acabará llena de cubos de millones de formas geométricas y tamaños.

Si tenemos la suerte de tener a alguien que pueda ayudarnos, el problema se resolverá más rápido, pero si no, tienes que coger esa "mierda" (como probablemente lo califiques en ese momento) y ponerte manos a la obra;
--...Arriba, izquierda, abajo, derecha...--
y cubo resuelto.
Una vez que hayas resuelto tu primer cubo, los siguientes serán más fáciles de resolver y tu actitud frente a ellos habrá cambiado.


P.D:. También para resolver puedes recurrir a un videotutorial de YouTube jajaja.

                                                                                     --Hasta el próximo Post--


viernes, 5 de agosto de 2016

Dos palabras infravaloradas.

Te quiero. Dos palabras infravaloradas,

Que se sueltan al aire y como el aire, vienen y se van.

Te quiero. Ocho letras con la fuerza de un león.

Ocho letras que pueden tener magia,

un poder con el que se puede mover montañas o

un dolor agudo en el alma cuando quien las pronuncia no es correspondido.
 
Te quiero. Un pronombre y un verbo, simple pero tan complicado.
Un “te quiero” es lo que teme un poeta y lo que desea un enamorado.
Dos palabras que han creado novelas, vida y muerte.

Te quiero. Puede ser lo que tú desees, algo muy grande

 o algo muy pequeño pero al fin y al cabo un te quiero es lo que es;

Dos palabras, ocho letras, un pronombre y un verbo.