Que se sueltan al aire y como el aire, vienen y se van.
Te quiero. Ocho letras con la fuerza de un león.
Ocho letras que pueden tener magia,
un poder con el que se puede mover montañas o
un dolor agudo en el alma cuando quien las pronuncia no es correspondido.
Te quiero. Un pronombre y un verbo, simple pero tan
complicado.
Un “te quiero” es lo que teme un poeta y lo que desea un
enamorado.
Dos palabras que han creado novelas, vida y muerte. Te quiero. Puede ser lo que tú desees, algo muy grande
o algo muy pequeño pero al fin y al cabo un te quiero es lo que es;
Dos palabras, ocho letras, un pronombre y un verbo.
Me encanta este poema ��
ResponderEliminar