jueves, 1 de febrero de 2018

Mínima distancia.




Acogerle en tu pecho,
Rodeándole con tus brazos.
Fuerte, cálido, necesario.
Nota su respiración cerca, calmada.
No es necesario decir una palabra,
solo hay que sentir, disfrutar del otro. 
No son necesarios los movimientos,
ni muecas, ni un solo gesto. 
Silencio, pausa. 
¿Tiempo? El necesario.
Necesario para que el emisor
mande un mensaje al receptor,
Y que este elabore su respuesta agarrándole más fuerte. 
Esos son los mejores abrazos.
Aquellos que te hacen cerrar los ojos,
y olvidar el tiempo, el lugar e incluso quien eres. 
Finalmente, cuando separas tu cuerpo del suyo,
solo hay distancia.
Distancia que se rellena de recuerdos con la otra persona
conforme caminas alejándote.
Recuerdos que podrán volver a fusionarse en el mínimo espacio,
tras el próximo saludo.


¡Bueeenaaas a todos aquellos que se aburran tanto como para leer mi blog! Si, siii...ya se... hace mucho que no me dirijo a vosotr@s, he estado un poco liada con examenes de la Uni. Pero tengo varias sorpresitas, que si tengo energía ire subiendo. No subiré todo de golpe, que pasa como con el chocolate " Una onza sabe bien, pero a partir de la número 20 empalaga" jajajaja. 


                                 ¡Hasta el próximo post!

No hay comentarios:

Publicar un comentario